enero 19, 2007

Pasaje cumplido

“El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha consagrado por la unción. Él me envió a llevar la Buena Noticia a los pobres, a anunciar la liberación a los cautivos y la vista a los ciegos, a dar la libertad a los oprimidos y proclamar un año de gracia del Señor”. Jesús cerró el Libro, lo devolvió al ayudante y se sentó. Todos en la sinagoga tenían los ojos fijos en él. Entonces comenzó a decirles: “Hoy se ha cumplido este pasaje de la Escritura que acaban de oír”. (Lc 4,18-21)

Miré al que estaba al lado mío y él también me miró; se encogió de hombros y levantando las cejas expresó con un gesto lo mismo que yo estaba pensando...”¿y esto?”. Unos minutos más me quedé sentado y cuando logré no ser el primero en irme, me encaminé silencioso hacia la puerta.
Claro que estamos como estamos – me retumbaba -; miles de años esperando y siempre lo mismo. Habla lindo, dice cosas lindas, pero...

En la Argentina de hoy ¿dónde están los oprimidos, dónde los esclavos? Yo no los veo.
Para liberar a los presos ya alcanzan las leyes y la justicia... esperaba otra cosa.
Yo no veo la realidad de esta forma.
El año de gracia del Señor, el año jubilar, es una institución del antiguo pueblo de Israel...
Hoy ya no se ven multitudes esclavizadas, familias esclavizadas...

Cri – cri – cri – cri –
(pasaba el carrito y me distrajo)
- ¡Soltá, Kaaaaren, soltá que pesa!...Soltá que falta...
Cri – cri – cri – cri -
cri-cri-cri


No claro que no. Tampoco se ve gente que ha perdido su tierra a manos de los poderosos.

¡Que desastre! Tuve que dar el paso más largo, casi un salto.
Era un viejo. Sí, un viejo. No me había dado cuenta...también, así acurrucado...
recién lo vi cuando tuve mirar para esquivar el charquito de pis que corría desde las mantas.

Los pobres no piden anuncio: ¡piden plata!.
"En Argentina no trabaja el que no quiere".
"Les das una pala y te la tiran por la cabeza".
"Sí, es un país bendito: plantás un palo y te brota una escoba..."
"Una vez, yo le regalé un sándwich a uno y cuando me di vuelta, lo dejó en un tacho".
"Una cajita de vino y un “plan trabajar” para cobrar sin trabajar. Eso es lo que buscan".
"Mandan a los chicos para comprar vino".
¡Pobre Jesús, se quedó en el tiempo!.
El mundo cambió y Él no se actualiza.
Yo no veo las cosas de ese modo.
Nadie, las ve así.
Por eso cada vez están más vacías las iglesias...¡porque estamos lejos de la realidad!

Mientras mascullaba estas cosas esperando que cambie la luz del semáforo, una mano me tocó y sobresaltó.
- ¡Jesús! ¿qué hacés acá?
- Te seguía...nos queda pendiente lo de la promesa.
- ¿Promesa? ¿Qué promesa?
- La del pasaje que dije que se había cumplido hoy.
- Bueno, sí...sabrás perdonar. Venía justo pensando en eso...
- ¡Esperá!, no sigas...-me dijo mientras se mojaba el pulgar con saliva –

Sin quitarme la vista de los ojos, me acercó su mano y yo, instintivamente cerré los míos. Sentí que me tocaba. Que me tocaba en serio.

- Dentro de un rato contame cómo vas. Dentro de un rato... cuando puedas ver.

Querido Jesús:
Tocame de nuevo que todavía veo borroso.
Tocanos de nuevo, que muchos, todavía vemos borroso.
Amén.



2 comentarios:

Semilla dijo...

Se me puso la mpliel de gallina... y me quedé sin palabras

Pablo Muttini dijo...

¡Buen síntoma! Semilla, eso es lo que nos pasa cuando vamos recuperando la vista.
Abrazo y a seguir pidiendo fuego.